CUNCHIBAMBA RECIBE ADOQUINES PARA ADECENTAMIENTO EN LA CALLE CAÑARIS
Dentro del proceso de intervención vial en sectores rurales de Ambato, la tarde de este 15 de abril la parroquia Cunchibamba será beneficiaria de la dotación de adoquines para la mejora de un tramo importante en su red vial. La calle Cañaris, ubicada en el barrio Juan Montalvo, será intervenida mediante un trabajo articulado entre el GAD Municipalidad de Ambato y el Gobierno Parroquial. La Municipalidad aportará con adoquines, maquinaria para limpieza y adecentamiento, mientras que el GAD-P de Cunchibamba asumirá la mano de obra y provisión de arena.
La intervención contempla el adoquinado de dos tramos diferenciados de la calle. El primero con una longitud aproximada de 230 metros y un ancho promedio de 4 metros, el segundo tramo, de 107 metros de longitud y un ancho promedio de 3 metros, completa la planificación de este proyecto. En total, se prevé cubrir un área de 1.241 metros cuadrados con adoquín, transformando la vialidad del sector.
Esta obra responde a una necesidad prioritaria para mejorar las condiciones de acceso y tránsito en una zona que beneficia directamente a unas 120 personas que durante años han esperado por una mejora estructural en la movilidad de su sector. El barrio Juan Montalvo verá así optimizada su conectividad interna, facilitando el desplazamiento peatonal y vehicular, especialmente en época de lluvias, donde las condiciones actuales generan dificultades para la movilidad.
El trabajo conjunto entre la Municipalidad de Ambato y el GAD Parroquial de Cunchibamba evidencia un modelo de gestión compartida para ejecutar mejoras en las zonas rurales. Estas intervenciones buscan consolidar una infraestructura vial básica y funcional, alineada a una planificación territorial que prioriza obras de accesibilidad y conectividad en todos los rincones del cantón. Es una obra que nace del compromiso compartido entre autoridades y ciudadanía, y que simboliza una nueva etapa en la transformación de las parroquias rurales de Ambato. Aquí, cada metro adoquinado es una promesa cumplida.
